Dirección: Mario Monicelli.
Intérpretes: Vittorio Gassman, Renato Salvatori, Marcello Mastroianni, Claudia Cardinale.
Con guión de Agenore Incrocci (“Camaradas”, “Seducida y Abandonada”), Furio Scarpelli (“Padres e Hijos”, “Vacaciones En Italia”), Suso Cecchi d’Amico (“Las Amigas”, “El Desafío”) y Mario Monicelli (“La Mujer Más Guapa Del Mundo”, “Un Héroe De Nuestro Tiempo”).
Sinopsis
Un boxeador llamado Peppe (Vittorio Gassman) acepta hacerse pasar por ladrón para liberar de la cárcel a Cosimo (Memmo Carotenuto).
Poco después planea el robo de una casa de empeños.
Crítica
Farsa criminal italiana que, con centro principal en Vittorio Gassman a pesar de su enfoque coral, parodiaba las películas de robos tan en boga en la época tras el éxito del “Rififí” de Jules Dassin.
Grupo dispar con personajes singulares y torpes.
Rasgos caricaturescos e irónicos.
Diversidad de ambientes.
Estupendas interpretaciones…
Es un film muy divertido y creativo en sus situaciones cómicas, tanto en la preparación del robo como en su ejecución y en el retrato de caracteres, uno preocupado por el llanto de su bebé (Marcello Mastroianni) u otro (Tiberio Murgia) sobreprotegiendo a su bella hermana (Claudia Cardinale). Totò aparece brevemente como experto en la apertura de cajas fuertes.
Dos años después se estrenó una secuela titulada “Rufufú Da El Golpe”.
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Vittorio Gassman
Marcello Mastroianni
Claudia Cardinale
Unos cuantos personajes sin oficio ni beneficio forman una banda de ladrones aficionados y planean el robo de una casa de préstamos. Por más que ellos se consideren inteligentes y piensen que disponen de un plan perfecto, desde el mismo comienzo de los preparativos del golpe se manifiesta la desorganización de la banda así como la ineptitud de todos y cada uno de sus miembros para llevar a cabo el robo.
En esta divertidísima comedia italiana ambientada en la posguerra, las situaciones cómicas se suceden una tras otra y muchas de ellas han sido imitadas por casi todos los grandes directores de comedia. Por ejemplo, ‘Granujas de medio pelo’ de Woody Allen no puede ser entendida más que como un homenaje a esta película.
Los personajes son cada cual más estrafalario y menos propicio para dar un golpe que incluye subirse por tejados o entrar por el hueco de la carbonera. Basta con decir que la banda incluye un viejecito de movilidad reducida y a Marcello Mastroianni (un fotógrafo sin cámara) con el brazo en cabestrillo. En cualquier caso, ellos no cejan en su empeño a pesar de todas las adversidades y el completo disparate del plan.
Vittorio Gassman interpreta a un boxeador que es a la vez el supuesto brillante cerebro de la banda (posiblemente, el más estúpido de todos ellos) y en la película también aparece una jovencísima Claudia Cardinale, cuyo hermano vigila en corto para que no se le acerque ningún hombre según la más estricta tradición familiar italiana. No faltan escenas impagables como la lección para abrir una caja fuerte que reciben los miembros de la banda por parte de un veterano del negocio o la confesión de Gassman ante la policía por un crimen no cometido, con el sorprendente objetivo de sustituir en la cárcel al verdadero autor.
No es fácil recodar películas más divertidas que ésta, a pesar de que incluya algún momento trágico y la acción se desarrolle en una época de total miseria. Su parte final es simplemente antológica.
A pesar de no ser muy conocida, “Rufufú” es sin duda uno de las obras clave de la comedia y una película obligada para cualquier amante del cine.
Fernando Zubiría
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