Dirección: Jan de Bont.
Intérpretes: Angelina Jolie, Gerard Butler, Ciaran Hinds, Noah Taylor.
Con guión de Dean Georgaris (“Paycheck”).
Sinopsis
Lara Croft (Angelina Jolie) tendrá que desplazarse a África para encontrar en la denominada “la cuna de la vida”: la legendaria Caja de Pandora, en donde se ubican todos los males del mundo.
El objetivo de esta búsqueda es evitar que la caja sea atrapada por el maléfico científico Jonathan Reiss (Ciaran Hinds), quien pretende controlar la valiosa reliquia para conseguir dominar el mundo.
Crítica
Secuela de las aventuras cinematográficas de la sexy diva de los videojuegos dirigida por el holandés Jan de Bont, antiguo operador de Paul Verhoeven (“Instinto Básico”) y productor (ha producido “Minority Report”), que destaca principalmente por su estilizado sentido visual y la presunta habilidad para otorgar intensidad a las secuencias de acción, algo que aquí brilla por su ausencia.
El guión, con implicaciones mitológicas e históricas totalmente fantaseadas, se sustenta, como suele ser norma, en el conocido enfrentamiento entre el bien y el mal y las características de héroes previos cinematográficos como Indiana Jones o James Bond, con la única intención de mostrar a la aventurera arqueóloga Lara Croft en múltiples escenarios y enfundada en diversos modelitos que ensalcen sus torneadas curvas, descuida la previsible historia, los diálogos y los personajes en pos de la espectacularidad y termina por languidecer y aburrir en muchos momentos.
Sin ser nada del otro mundo, resulta ligeramente más apreciable que su predecesora dirigida por Simon West (otro artesano de la acción ostentosa), pero tampoco estimula más allá de sus formulistas proposiciones de videojuego traspasado a la pantalla grande.
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