• Por Antonio Méndez

don-quijote-de-la-mancha-novelaEl maduro hidalgo Alonso Quijano ha enloquecido después de leer un sinfín de novelas de caballerías.
Queriendo emular a sus héroes, convence a un rústico vecino de su pueblo, Sancho Panza, para que le acompañe como escudero en sus andanzas heroicas bajo el nombre de Don Quijote de la Mancha, un aspirante caballero andante enamorado de una joven llamada Dulcinea del Toboso.

“El Quijote” es una de las grandes obras de la literatura universal cuya riqueza temática sobrepasa su contexto cronológico para convertirse en ecuménica y atemporal.




Escrita a comienzos del siglo XVII (la primera parte fue terminada en 1605 y la segunda en 1615), fue ideada esencialmente por Miguel de Cervantes como una novela cómica, una parodia de las novelas de caballerías que triunfaban popularmente por aquellos momentos.

don-quijote-libro-comentarioBasó las humorísticas andanzas de sus personajes-símbolo en un brillante e irónico contrapunto y conflicto entre idealismo y pragmatismo, imaginación y realidad, personificados en los inmortales Don Quijote y Sancho Panza.

A su lado encontramos un numeroso grupo de caracteres y ambientes que configuran un vivo y divertido muestrario de tipologías de la época.

La narración introduce digresiones y variaciones de tono, siempre con una perspectiva de humor, debido a que, seguramente, el autor no tenía en mente al iniciar la escritura de la obra, dividida en dos partes, el desarrollo y la conclusión definitiva de la misma.

En ocasiones suspende la acción narrativa de sus personajes para introducir su opinión directamente al lector.

El narrador en tercera persona es el propio Cervantes, quien afirma trasladar al libro un relato narrado por un historiador árabe de Toledo, naturalmente ficticio, de nombre Cide Hamete Benengueli.

Una joya literaria imprescindible.




Apuntes de su contexto político
En 1615, año de la publicación de la segunda parte de esta novela, España se encontraba regida por Felipe III, hijo de Felipe II y Ana de Austria. El poder político estaba en manos del duque de Lerma, valido del rey. Ese año, Ana de Austria, infanta e hija de Felipe III, se casó con el rey Luis XIII de Francia. El hijo del rey, Felipe, futuro Felipe IV, contrajo matrimonio también en 1615 con Isabel de Borbón, hermana de Luis XIII.

Otros textos literarios aparecidos en 1615

El Perro Del Hortelano, de Lope de Vega
Ocho Comedias y Ocho Entremeses, de Miguel de Cervantes
Don Gil De Las Calzas Verdes, de Tirso de Molina
Circe y Ulises, de William Browne
Albumazar, de Thomas Tonkis
La Caza Del Pastor, de George Wither
El Caballero Melancólico, de Samuel Rowlands
El Triunfo del Hymen, de Samuel Daniel

Así comienza esta obra magna:

En un lugar de La Mancha, de cuyo nombre no quiero acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor.
Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes y algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda.
El resto della concluían sayo de velarto, calzas de velludo para las fiestas, con sus pantuflos de lo mismo, y los días de entre semana se honraba con su vellorí de lo más fino.
Tenía en su casa un ama que pasaba de los cuarenta, una sobrina que no llegaba a los veinte, y un mozo de campo y plaza que así ensillaba el rocín como tomaba la podadera.
Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años. Era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza.
Quieren decir que tenía el sobrenomre de Quijada o Quesada (que en esto hay alguna diferencia en los autores que deste caso describen), aunque, por conjeturas verosímiles se deja entender que se llamaba Quejana. Pero esto poco importa a nuestro cuento, basta que en la narración no se salga un punto de la verdad.
Es pues, de saber que este sobredicho hidalgo, los ratos que estaba ocioso (que eran los más del año), se daba a leer libros de caballerías, con tanta afición y gusto, que olvidó casi de todo punto el ejercicio de la caza y aún la administración de su hacienda, y llegó a tanto su curiosidad y desatino en esto, que vendió muchas hanegas de tierra de sembradura para comprar libros de caballerías en qué leer…..