Para las mujeres el mejor afrodisíaco son las palabras, el punto G está en los oídos, el que busque más abajo está perdiendo el tiempo.
Es mejor ser hombre que mujer, porque hasta el hombre más miserable tiene una mujer a la cual mandar.
Para las mujeres el mejor afrodisíaco son las palabras, el punto G está en los oídos, el que busque más abajo está perdiendo el tiempo.
Es mejor ser hombre que mujer, porque hasta el hombre más miserable tiene una mujer a la cual mandar.