• Por AlohaCriticón

dino valente 1968Crítica

Únicamente una guitarra de doce cuerdas y una voz en la mayoria de los temas.

Esta obra de Dino Valente está especialmente recomendada para aquellos que creen, como si les fuera la vida en ello, que una voz puede transmitir emociones, sentimientos ……más alla de los significados de las palabras y los idiomas.

Y que puede llevarte a lugares en los que no has estado y transmitirte la dulzura y melancolía de momentos no vividos. Escucha “Listen To Me”o “New Wind Blowing”……y si te dejan indiferente, empieza a preocuparte.




El cantante de Quicksilver Messenger Service grabó su único disco en 1968 y consiguió una obra intemporal, desafortunadamente muy desconocida, que no se encuadra en ninguna de las corrientes dominantes en la segunda mitad de los sesenta.

Por supuesto que se oyen ecos de Dylan, como en la música de TODOS los que han grabado después de 1963, en lo que comunmente conocemos como folk y rock. Pero a diferencia de tantos y tantos, Valente derrocha personalidad y clase, por encima de modas que el viento se llevó y se llevará.


Para mi este disco está más vivo que la mayoria de lo editado en las tres últimas decadas y se ha convertido en uno de esos discos de cabecera sin los que no puedes concebir tu existencia, como “Astral Weeks”, “Solid Air” o “Pink Moon” entre otros 300 o 400.

Francisco de Paz