• Por Antonio Méndez

Naturales de San Francisco, y bajo el liderazgo de su guitarrista principal, Cyril Jordan, los Flamin’ Groovies nunca saborearon las mieles del éxito sino que permanecieron durante toda su existencia como una banda de culto apoyada por una facción de fieles seguidores que han sabido apreciar un concepto musical totalmente ajeno a lo que se estilaba en su época y que conoció diferentes variantes a lo largo de los años.

Aunque en este recopilatorio se incluyen tres clásicos como “Slow Death”, “Teenage Head” y “Tallahassee Lassie”, con un sonido más garajero y pertenecientes a la primera etapa del grupo, “Groovie’s Greatest Grooves” se centra más en el material grabado para el sello Sire Records entre 1976 y 1979, cuando los Groovies se habían establecido en Inglaterra y sustituyeron al antiguo vocalista Roy Loney por Chris Wilson, quien junto a Jordan condujo el sonido del quinteto hacia un pop melódico deudor del que practicaban los mejores grupos de la Invasión Británica de mediados de los 60 sin perder de vista a los grupos californianos de la misma época, en especial los Byrds.

Con producción de Dave Edmunds, la pareja Jordan/Wilson se compenetró a la perfección y escribió una estimable cantidad de obras maestras que podían haberse editado sin ningún problema durante la década prodigiosa en piezas que en su esencia van del jangle pop/folk-rock al garage-rock 60’s o al power-pop.

Maravillas como “Yes, Its True” (puro Lennon/McCartney), “Shake Some Action” (incitante ritmo y arrollador estribillo), “First Plane Home”, esplendorosos ejercicios melódicos con resonancias Searchers y Byrds como “You Tore Me Down”, “I Can’t Hide” y “I’ll Cry Alone”, “Please Please Girl”, “Yes I Am” (que bien podría encontrarse en el “Aftermath” de los Rolling Stones), “Teenage Confidential” (hermosa balada que parece extraída del catálogo de los Tremeloes), “Don’t Put Me On” (magistral introducción en la que se van incorporando uno por uno todos los instrumentos) o la contagiosa línea de guitarra con destacables armonías vocales halladas en “All I Wanted”.

También aquí se recogen alguno de los homenajes que rindieron a algunos de sus ídolos, como los Beatles (“There’s a Place”), Bob Dylan (“Absolutely Sweet Mary”) o Phil Spector (con el éxito de Ike & Tina Turner “River Deep, Mountain High”).

Ir a la biografía AlohaCriticón de Flamin’ Groovies