Dirección: John Derek.
Intérpretes: Bo Derek, Ana Obregón, George Kennedy, Andrea Occhipinti.
Con guión de John Derek (“Los Fantasmas No Pueden… Hacerlo”).
Sinopsis
Años 20.
Ayre “Mac” MacGillivery (Bo Derek), miembro de una adinerada familia, ha terminado los estudios. Junto a su amiga Catalina (Ana Obregón) y con el chófer Cotton (George Kennedy), viaja para perder la virginidad con la esperanza de encontrar a un émulo de su ídolo cinematográfico, Rodolfo Valentino.
Primero viaja a Marruecos, en donde conoce a un jeque (Greg Bensen). Más tarde se traslada al sur de España, en donde se enamora de un torero llamado Ángel (Andrea Occhipinti).
Crítica
Después de rodar “Tarzán”, John Derek dirigió a su mujer Bo en esta cinta sexploitation ambientada en España, con la rubia protagonista intentado perder la virginidad con un latin lover estilo Rodolfo Valentino.
En su propósito se hace acompañar por Ana Obregón, en un personaje que poco o nada aporta a la historia, y de George Kennedy, ídem de ídem.
Al trío se le une una jovencita Olivia d’Abo (en un personaje de gitana) en su película debut.
La película, producida por Menahem Golem, es infumable, con una trama aburrida y un softcore con regodeo esteticista de spot.
Bo Derek, nada creíble como estudiante de instituto recién graduada, demuestra capacidad para montar a caballo, no faltando la cámara lenta para realzar sus talentos con toros y equinos; se pasea en plan Lady Godiva con la melena cubriendo sus partes; y disfruta del sexo con el neón remarcando el “éxtasis” en el clímax de renacimiento coital.
Un bodrio erótico olvidable, barato, que contó en su inicio con Fabio Testi como protagonista pero que abandonó el rodaje por complicaciones de salud.
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