Dirección: Walt Becker.
Intérpretes: Darby Camp, Jack Whitehall, John Cleese, Izaac Wang.
Con guión de Blaise Hemingway (“Vampiros Contra El Bronx”), David Ronn (“Baywatch: Los Vigilantes De La Playa”) y Jay Scherick (“Norbit”).
Sinopsis
Emily Elizabeth Howard (Darby Camp) vive en Nueva York junto a su madre, Maggie (Sienna Guillory).
Emily, que es acosada en su colegio por otras niñas, tiene que quedarse al cuidado de su irresponsable tío, Casey (Jack Whitehall), tras la marcha de Maggie a causa de un viaje de trabajo.
En un paseo por un parque con Casey, Emily se encapricha con un pequeño perro rojo que se encuentra en la carpa de Bridwell (John Cleese), un misterioso rescatador de animales.
Casey no está conforme, sin embargo el perro termina dentro de la mochila de Emily, quien le llamará Clifford.
Su amor hará que crezca de forma gigantesca.
Crítica
Película basada en un personaje literario infantil creado por Norman Bridwell que está destinada a los más pequeños de la casa.
El film une a un gigante perro rojo llamado Clifford (CGI) y a la niña Emily (Darby Camp) en una historia de comedia con aventura y fantasía que trata temas como la amistad, la unión, la importancia del papel de la comunidad, del vecindario… transmitiéndose mensajes positivos de integración, de aceptación, de poner en valor lo que te hace diferente de los demás.
Es una fábula bienintencionada, un cuento de hadas de aceptación.
Se ambienta en la ciudad de Nueva York, en el entorno de Central Park, dentro del piso en el que vive la niña junto a su madre (y su tío), en un vecindario amable con personajes excéntricos que intentan ayudar a Emily a proteger a Clifford.
El perro es un personaje simpático, juguetón, tierno, con un CGI forzado en algunas escenas, siendo el vínculo más importante el de la niña Emily con su amigo de escuela Owen.
Los dos forman equipo cuando entra en juego la inevitable amenaza de una malvada corporación.
El humor es blanco, un poco tontorrón en ocasiones, sin dobles sentidos ni concesiones al público adulto. Hay persecuciones, aventuras y travesuras.
En resumen, resulta bastante simple, con toques de extravagancia y chistes fáciles, siendo los mejores momentos las situaciones de fantasía y magia.
Puede entretener a los más pequeños.
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