Dirección: Fred Cavayé.
Intérpretes: Dany Boon, Laurence Arné, Noémie Schmidt, Patrick Ridremont.
Con guión de Nicolas Cuche (“Los Aprendices”, “Jojo La Frite”) y Laurent Turner (“9 Meses… De Condena”, “La Presa”).
Sinopsis
François Gautier (Dany Boon) es un violinista que está obsesionado con no gastar y ahorrar.
Mira cuidadosamente los tickets de compra, dejó a su ex antes de su cumpleaños por no comprarle un regalo, en el restaurante pide los mejillones por unidad…
Las cosas cambian cuando aparece en su vida su hija desconocida Valerie (Noémie Schmidt), una joven que choca frontalmente con las maneras tacañas de su padre que piensa que actúa así para destinar dinero a niños pobres de México.
Crítica
Farsa exagerada y reiterativa. Repite constantemente los mismos gags, un repertorio de tópicos estirados que no evolucionan, hecho que termina desvinculándote de la historia.
En los primeros momentos de la película se presenta de forma efectiva al protagonista, el tacaño François Gautier (interpretado por Dany Boon), incluso antes de nacer, con su madre pretendiendo que no sea un derrochador como su padre.
En unas secuencias vemos su infancia, juventud y madurez marcadas por una tacañería caricaturesca.
Después de esta simpática introducción, la historia necesita tener un sentido argumental pero no lo encuentra.
Se pierde entre una floja comedia romántica y la convivencia con una hija buscando sus orígenes con elementos melodramáticos forzados.
El peso interpretativo del film recae en un histriónico Dany Boon, con personajes en contrapunto que aportan poco en un desarrollo pobre y sin demasiada gracia.
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