Dirección: Ramón Fernández.
Intérpretes: Hilda Aguirre, Enrique Guzmán, Margot Cottens, Sara García.
Con guión de Vicente Escrivá (“El Golfo”) y José María Sánchez Silva (“Marcelino, Pan y Vino”).
Sinopsis
Una joven llamada María (Hilda Aguirre), acostumbrada a salir de noche y cantar en un local de copas, decide ingresar en un convento ante la sorpresa de Ernesto (Enrique Guzmán), su novio, y de su adinerada tía (Margott Cottens).
Crítica
Co-producción hispano-mexicana que cuela la música pop dentro de un convento.
La historia de esta comedia musical de ambiente religioso no es muy creíble ni original… le falta mayor introducción de personajes, las decisiones del personaje principal son precipitadas, no faltan estereotipos, las resoluciones son previsibles…
En cuanto a su vertiente de humor, las situaciones dentro del convento no destacan por su inventiva a base de contrastes de pensamiento y modos de vida, con el personaje fuera de contexto que arrastra a su nuevo ambiente hacia posturas (presuntamente) más positivas.
A destacar dentro del guión rutinario de carácter sentimental la participación del grupo mexicano de rock garajero Los Yaki.
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