Dirección: Pedro Lazaga.
Intérpretes: José Luis López Vázquez, Gracita Morales, Fernando Fernán Gómez, Goyo Lebrero.
Con guión de José María Palacio (“Las Cicatrices”, “El Rostro Del Asesino”).
Sinopsis
En el metro de Madrid trabajan Pablo (José Luis López Vázquez) y Luisa (Gracita Morales), un matrimonio que decide viajar a Alemania para mejorar su situación de pareja, ya que no coinciden casi nunca en el hogar a causa de sus horarios laborales. En el país germano logran emplearse en Düsseldorf como sirvientes del misterioso barón de Rosenthal (Fernando Fernán Gómez).
Crítica
Comedia vampírica de Pedro Lazaga que además de remedar con cierta gracia los tópicos en torno a los procederes de chupasangre de un sosias de Drácula, aborda la emigración como mejora de vida, ironiza sobre el complejo de algunos con el “nivel de vida europeo”, y caricaturiza el estrés laboral urbano, que hace girar la vida del ciudadano en torno a su trabajo, desapegándole de su vida personal y familiar.
José Luis López Vázquez y Gracita Morales no pueden más. En un año de casados casi no han dormido juntos a causa de tanto trabajar y trabajar. Esto les lleva a viajar a Alemania y conseguir una ocupación que les introduce en un escenario singular de terror gótico.
Lazaga comienza en el metro esta aventura empleando un punto de vista subjetivo y cámara al hombro, significando el agitado bullicio urbano de forma puntual con uso de la cámara rápida. Más adelante la historia se ambienta de forma estupenda con ambientes lluviosos y nocturnos con una mansión aislada con amplias estancias, un órgano de tubos adornado con pinturas de esqueletos, puertas chirriantes, sonidos de theremin y rasgos paródicos-absurdos que llevan incluso a la interpretación de “Hungría, patria querida”.
Las situaciones humorísticas son irregulares pero su manifestación no carece ni de ritmo ni de destellos de ingenio.
Si el trío protagonista está estupendo, hay que hacer una mención especial para Goyo Lebrero, un nunca bien ponderado actor secundario que aquí interpreta al sirviente “canino” de Fernán Gómez.
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José Luis López Vázquez
Gracita Morales
Fernando Fernán Gómez
Goyo Lebrero