• Por AlohaCriticón

DÍAS DE VINO Y ROSAS (1962)

Dirección: Blake Edwards.

Intérpretes: Jack Lemmon, Lee Remick, Charles Bickford, Jack Klugman.

Joe Clay (Jack Lemmon), relaciones públicas de una empresa, conoce y se enamora en una fiesta de Kirsten Anderson (Lee Remick), con quien termina casándose.

Ambos terminarán sumidos en el infierno del alcoholismo.

Aunque perteneciente a la generación de directores que realizó su obra a

partir de los sesenta, ya con el aparato gubernamental de la censura muy

debilitado, y que su carrera cinematográfica se desarrolla

principalmente en el campo de la comedia descarada y cínica, en 1963, y

como excepción en su filmografía, el austríaco Brake Edwards rueda la

película de corte dramático “Días de vino y rosas”, en la que, sin

perder el buen oficio de la Meca del cine, afronta de una forma cruda y

realista el problema del alcoholismo instalado en la clase media

americana, clase media que sirve, significativamente, de cimiento a todo

el sistema.

De vez en cuando la industria del entretenimiento que representa el

Hollywood comercial; de buen grado, o mas bien porque se le “cuelan”

algunos directores con ánimo de contar “algo más”, deja de servir a la

política exterior de su país, y al alienamiento intelectual y moral de

sus ciudadanos, mostrando una idílica sociedad que ha alcanzado la

felicidad universal a través de los electrodomésticos, y nos deja ver

alguna miseria, alguna de las “cucarachas” que, ocultas, abarrotan el

moderno y confortable edificio capitalista.

Las soberbias interpretaciones de Lee Remic y Jack Lemon, así como la

reflexión a la que nos obliga la dura exposición del tema, hace del film

un clásico imprescindible.

Ángel Lapresta

Enlaces

Blake Edwards

Jack Lemmon

Lee Remick

Charles Bickford