EL GRECO (2007)

Dirección: Yannis Smaragdis.

Intérpretes: Nick Ashdon, Juan Diego Botto, Dimitra Matsouka, Lakis Lazopoulos.

Siglo XVI. El pintor Domenico Theotocopoulos (Nick Ashdon) ha abandonado la isla de Creta después que los venecianos la hayan ocupado.

En la ciudad de Venecia, Domenico mantiene una relación con Francesca Da Rimi (Dimitra Matsouka), hija del gobernador veneciano en Creta, y colabora con el célebre artista Tiziano (Sotiris Moustakas) antes de partir hacia España tras ser descubierto por un sacerdote conocido como el Niño de Guevara (Juan Diego Botto).

Basándose en una biografía escrita por Dimitris Siatopoulos, Yannis Smaragdis fabula sobre la vida del Greco en esta película centrada en la relación mantenida entre el pintor de origen griego y el clérigo e inquisidor Fernando Niño de Guevara (no confundir este personaje i con el pintor barroco Juan Niño de Guevara).

El film relega el interés sobre el progreso y el legado artístico del artista para ubicarse en la maniquea confrontación entre estos dos personajes, ambos planos y enfocados de manera tan inofensiva como trivial.

Como suele ser norma uno es buenismo, dechado de virtudes, el otro malismo (y sin faltarle los gratuitos retazos homosexuales). Si no se atiene totalmente a la historia, se crea la confrontación. Si se atiene en parte, se agranda sin matices.

La película, con música de Vangelis, se conduce a través de una rutina simplista con memorias del personaje principal en voz en off, en una expresión cinematográfica que confunde el ritmo contemplativo y la reflexión independiente del artista con el sopor y la grandilocuencia.

Las actuaciones no pueden elevar la mediocridad de los diálogos, y la ambientación, sombría, no brilla como debería.

El conjunto resulta muy apagado (no deja de establecer contraste de luces y sombras como reflejo de voluntades y maneras de pensar). Le falta pasión, dinamismo, vitalidad, profundidad en su faceta artística, variantes, naturalidad…