• Por AlohaCriticón

EL MANUSCRITO ENCONTRADO EN ZARAGOZA (1965)

Dirección: Wojciech Has.

Intérpretes: Zbigniew Cybulski, Iga Cembrzynska, Elzbieta Czyzewska, Gustaw Holoubek.

A comienzos del siglo XIX un oficial de las tropas napoleónicas halla en Zaragoza un extraño manuscrito, en el que se narran los viajes y peripecias de Alfonso Van Worden (Zbigniew Cybulski). De camino a Madrid, y tras un largo viaje por Sierra Morena, este noble caballero decide pasar la noche en Venta Quemada, una misteriosa posada donde…

Film de culto, donde fantasía y realidad se entremezclan en una atmósfera de misterio, dando lugar a una excitante y surrealista aventura.

La película adapta la obra homónima del ilustrado polaco Jan Potocki, aristócrata que publicó su novela (una de las cumbres de la literatura gótico-fantástica europea) en dos partes, la primera en 1804 y la segunda en 1813.

Tadeusz Kwlatkowski, autor del guión, se centra en la primera de ellas y se inspira en la segunda (Tres relatos de Avadoro) dando rienda suelta a su narrativa en la segunda mitad del film.

Al igual que la novela de Potocki, la película utiliza la técnica narrativa de “cajas chinas” (influencia clara del Decamerón de Boccaccio y sobre todo de Las mil y una noches) donde las historias se encuentran unas dentro de otras, con elementos de conexión entre algunas de ellas.

No obstante, el tono del film es mucho más suave y liviano y menos sombrío que el de la novela. Aunque capta muy bien el halo esotérico, libertino y picaresco de su predecesor literario.

El resultado es una obra de impagable divertimento, que estimula espíritu e imaginación, y que ha sido admirada por cineastas como Buñuel, Scorsese y Coppola. Es de recomendable visionado para amantes del ocultismo, ya que el recorrido del personaje principal es una especie de viaje iniciático donde uno se topa con cabalistas, endemoniados, espectros y ahorcados.

Como conclusión, destacar la magnífica banda sonora de Krzystof Penderecki que varía desde la música clásica, pasando por sonidos electrónicos modernos, hasta llegar al flamenco.Ricardo Pérez