Dirección: Steven Quale.
Intérpretes: Richard Armitage, Nathan Kress, Arlen Escarpeta, Alycia Debnam-Carey.
Con guión de John Swetnam (“Step Up All In”, “Evidence”).
Sinopsis
La ciudad de Silverston es azotada en un sólo día por una serie de tornados que convierten a la localidad en un lugar caótico y mortal.
Mientras sus habitantes buscan refugio, los cazadores de tormentas predicen que lo peor todavía está por llegar.
Crítica
Catástrofe natural que rememora las peripecias del “Twister” de Jan de Bont. La película se despreocupa de trama y personajes para centrarse en el aspecto visual.
Los efectos especiales, que crean una épica de supervivencia con tipos excitados ante tanto trajín atmosférico, son espectaculares, suficientemente realistas. Ese es el único mérito de un film al que le falta consistencia en el enfoque narrativo, le sobran caracteres y la historia, muy mediocre, tendría que haberse tomado menos en serio y evitar conclusiones de “to er mundo é güeno”.
La naturaleza tiene más fondo que unos intérpretes reunidos en un torbellino de clichés y rellenos dramáticos sobre familia, supervivencia y reflexiones banales sobre actitudes y consecuencias que someten la intensidad emocional a la física.