• Por AlohaCriticón

los invasores the 49th parallel movie poster cartel pelicula
Dirección: Michael Powell.
Intérpretes: Laurence Olivier, Leslie Howard, Raymond Massey, Anton Wallbrook.


Inmerso en aguas canadienses, un submarino alemán U-37, hunde una nave civil. Inmediatamente la marina y la aviación de Canadá activan el estado de alerta para dar con el sumergible germano. Una vez localizado es bombardeado, falleciendo todos sus ocupantes salvo un pequeño grupo de hombres que desembarca en la bahía de Hudson liderados por el teniente Hirth (Eric Portman).

“Los invasores” forma parte, junto con “One of our aircraft is missing” (1942) y “The volunteer” (1943), de la trilogía bélica que consolidó la relación artística de Michael Powell y el húngaro Emeric Pressburger, y que les llevaría a crear la productora The Archers.

El título original de la cinta, “49th Parallel”, hace alusión a la estratégica zona geográfica donde se ubica la frontera entre Canadá y Estados Unidos, determinante en el devenir de la trama. Powell, asentándose en el guión de Pressburger, relata una historia acaecida durante la Segunda Guerra Mundial, pero que, al estar localizada en territorios tan alejados de la Europa en la que se dilucida el conflicto, hace que su originalidad atraiga desde un primer momento (así lo reconoció

Hollywood, premiando al filme en el apartado de mejor argumento original). “Los invasores” podría considerarse como una “road movie”, centrada en el deambular desnortado de unos soldados alemanes en Canadá y sus consiguientes encontronazos con sus sorprendidos habitantes: desde el genial e impulsivo trampero, Lawrence Olivier; pasando por el líder espiritual, Anton Walbrook; el ensayista de la naturaleza, Leslie Howard; y acabando en el descubierto desertor, Raymond Massey.

No se debe terminar este comentario sin aludir al excelente trabajo del montador, nada más y nada menos que el gran David Lean. Su siguiente película, “Sangre, sudor y lágrimas” le situaría ya en la dirección junto a Noel Coward, iniciando, a partir de entonces, una de las carreras más brillantes que pueden encontrarse en la cinematografía de la segunda mitad del siglo veinte.

Alberto Alcázar

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