SOMERS TOWN (2008)
Dirección: Shane Meadows.
Intérpretes: Thomas Turgoose, Piotr Jagiello, Elisa Lasowski, Ireneusz Czop.
Somers Town, un suburbio de Londres, es el lugar en el que se cruzarán los destinos de dos adolescentes sin brújula: Marek (Piotr Jagiello), un polaco que viste camisetas de fútbol de equipos ingleses y Tomo (Thomas Turgoose), recién llegado de las Midlands en busca no se sabe qué.
La amistad de los jóvenes irá estrechándose por el común desarraigo y la fijación sentimental por la misma mujer.
Partiendo de un proyecto de cortometraje que documentara el desarrollo urbanístico alrededor de la estación internacional de Eurostar, la irrupción de Shane Meadows en los preparativos hizo que esa idea se ampliara dando lugar a un relato de ficción protagonizado por el sorprendente Thomas Turgoose.
“Somers Town”, sexta película de Meadows, retoma la propuesta que materializara en “This is England” (2007), considerándose una prolongación del deambular de Turgoose por los pedregosos terrenos que pisa la juventud inglesa de clase más bien baja.
Filmada en un brumoso y tenebrista blanco y negro (fotografía cuya autoría recae en Natasha Braier, la misma que firmara ese apartado técnico en “XXY” (2007)) “Somers Town” rezuma los ambientes y personajes que son habituales en la obra de Ken Loach, pudiéndose afirmar que Meadows representa el relevo generacional que el cine realista inglés precisa.
A pesar de transmitir, en general, una imagen bastante desastrada de la rutina adolescente, quedan, no obstante, loables intentos de enderezar rumbos, reflejados en la desinteresada ayuda del personaje de Jane, interpretado por Katie Dickie; o en la generosa actitud del orondo Graham de echar una mano a Tommo y hacer de él una eficaz mucamita que se pueda ganar sus poquitos “pounds”.
Si bien el título aquí comentado no alcanza la intensidad y el frenético ritmo que Meadows imprimía en “This is England”, la presencia de Turgoose (con un notable estirón físico de por medio), el sobrio y bien ejecutado guión de Paul Fraser y la música escrita e interpretada por Gavin Clark, hacen de “Somers Town” un entretenido y breve (setenta y dos minutos) experimento de cinematografía social.
Alberto Alcázar