Dirección: Walt Dohrn y David P. Smith.
Intérpretes: Película de animación.
Con guión de Jonathan Aibel (“Kung Fu Panda”), Glenn Berger (“Kung Fu Panda 2”), Maya Forbes (“El Rey De La Polca”), Elizabeth Tippet (“La Vida En Piezas”) y Wally Wolodarsky (“Monstruos Contra Alienígenas”).
Sinopsis
La Reina Barb de los Trolls Hard Rock quiere conquistar todos los reinos Trolls, entre ellos el Pop de la Reina Poppy, para que solo se escuche su música.
Esto lo logrará si consigue todas las cuerdas de su guitarra y hace sonar un acorde que convertirá a todos los diferentes Trolls (Pop, Funk, Country…) en Trolls Hard Rock.
Crítica
Colorista comedia musical de animación, secuela de “Trolls”, ambas películas orientadas a los más pequeños de la casa.
La trama tiene como acción a la villana Barb, dispuesta a robarles la identidad de los otros reinos Trolls, convirtiéndoles a todos en Trolls Hard Rock y anulando así sus propias particularidades.
Los héroes intentarán impedirlo, Poppy y Branch, utilizando la música como principal arma.
El mensaje principal es el de las bondades de la diversidad y el respeto a la identidad natural, estableciendo una analogía con temas políticos pero más fáciles de entender para los niños a través de la música.
Se pondera, en un recorrido “geográfico” muy superficial por diferentes géneros musicales, la aceptación de otras opiniones y gustos, por diferentes que sean a los propios.
La narración es muy dinámica y la trama muy sencilla pero entretenida, en especial para los más niños.
En el aspecto visual está llena de colorido, arco iris, purpurina a raudales… cascadas hechas con cintas plateadas, imágenes oníricas de tigres que saltan a la cámara, animación 2D y 3D que se cruzan en la narrativa.
Esta segunda parte gira completamente en torno a la música. Hay números musicales continuos, lo que provoca que los personajes y la historia tengan menos interés que la primera.
Combina e integra bastante bien las canciones, haciendo perfectamente las transiciones entre unas y otras, mezclando música clásica, pop, country, funk, rock… (aunque todas con maquillaje pop). La película tiene su mayor baza en esas canciones y en el diseño visual.
Algunos personajes, como Poppy, la gran protagonista, muestra más complejidad; tiene que aprender a escuchar para lograr ser una buena reina.
Al ser una película tan vinculada al mundo de la música, la trama principal depende mucho de este aspecto. La historia básica tiene su gracia, sin resultar desternillante, y la división en reinos de trolls según géneros tiene potencial pero con un desarrollo simple y predecible.
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