Dirección: Younuts.
Intérpretes: Isabella Ferrari, Lorenzo Zurzolo, Luca Ward, Cristiano Caccamo.

Con guión de Caterina Salvadori, Enrico Vanzina (“Lo Que Ellas Se Callan”) y Ciro Zecca (“Quel Bravo Ragazzo”).

Sinopsis

Llega el verano y los visitantes a la playa de Riccione se multiplican. Entre ellos Ciro (Cristiano Caccamo), un aspirante a músico que termina siendo contratado como socorrista, o el joven ciego Vincenzo (Lorenzo Zurzolo), que llega a Riccione acompañado por su madre, Irene (Isabella Ferrari), para buscar amigos e iniciar una primera relación amorosa.

Crítica




Comedia coral adolescente con ambiente turístico y con el amor como centro de sus acciones.
Se desarrolla en un verano en la playa italiana de Riccione, un verano que cambiará la vida de sus protagonistas, jóvenes que van trabando amistad mientras se ayudan mutuamente.

Todo sucede en Riccione, una localidad de veraneo de la costa italiana de Rímini con una playa kilométrica llena de hamacas, hoteles, fiestas, conciertos, parques acuáticos…
Por momentos, todo parece una excusa para configurar un largo anuncio publicitario de la localidad.

La trama crea historias románticas cruzadas con escaso contenido.
La más salvable es la de Vincenzo, un joven ciego que trata de emanciparse de su madre sobreprotectora, hacer amigos, vivir un amor de verano.
El resto de las historias tienen poco interés: una joven desilusionada con su novio, un aspirante a cantante que se convierte en socorrista y se enamora de la mejor amiga de su novia… resultando forzadas y poco creíbles, muy esquemáticas.




Lo mejor del reparto es Lorenzo Zurzolo interpretando al citado Vincenzo, el personaje de mayor interés y profundidad.
Los otros no tienen demasiada singularidad, en especial los femeninos, que resultan intercambiables.

La película pondera el riesgo de amar a alguien, el valor de admitirlo, de arriesgarse y de dejarse llevar.
Es una película ligera, insustancial… pero, por lo menos, no aburre.