Dirección: Pete Docter y Ronaldo del Carmen.
Intérpretes: Película de animación.
Con guión de Ronaldo del Carmen, Josh Cooley, Pete Docter (“Up”, “Monstruos S. A.”), Bill Hader, Meg LeFauve y Amy Poehler. Con producción Pixar/Disney.
Sinopsis
Riley es una niña que se traslada con su familia desde el Medio Oeste hacia San Francisco, en donde tendrá que adaptarse equilibrando sus diferentes emociones: la alegría, el miedo, la ira, el disgusto o la tristeza.
Crítica
Pixar se puso emocional, más que intelectual, en esta sobrevalorada película de animación cuyo concepto temático y estético está por encima de su ejecución.
La idea, bastante creativa y original en principio, es dotar de antropomorfismo a las emociones y, con mensaje de equilibrio y colaboración, introducirlas en un viaje de iniciación y fantasía psicológica que tanto toma de Lewis Carroll como de J. M. Barrie, de Sigmund Freud o del surrealismo.
La resolución es previsible, sentimental, los personajes son bastante inaguantables con una típica confluencia de grupo dispar, el humor brilla en casi todo el film por su ausencia, y la épica sufre de intentar complicar la angustia adolescente, vista desde el punto de vista de sus emociones, con una narrativa en ocasiones caótica de videojuego arcade y un comistrajo esteticista que aporta confusión a su visión de aceptación y madurez en escenarios de memoria, pensamientos abstractos o subconsciente. El resultado provoca más aburrimiento que entusiasmo.
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