Dirección: Jay Karas.
Intérpretes: Seth Carr, Tichina Arnold, Adam Pally, Momona Tamada.
Con guión de Peter Hoare (“Objetivo: Hasselhoff”), Zach Lewis (“Klaus”), Jim Mahoney (“The Etiquette Ninjas”) y Larry Postel.
Sinopsis
Leo (Seth Carr) es un niño de once años de edad que vive en la localidad de Fallbridge con su abuela (Tichina Arnold) y su padre (Adam Pally) después de que su madre les haya abandonado para vivir con otro hombre en Nueva York.
Leo, acosado en el colegio, es un fanático de la lucha. Un día, escondiéndose de sus acosadores, encuentra una máscara mágica con la que logra superpoderes y que utiliza para competir en un concurso de lucha para poner obtener 50.000 dólares y ayudar a su padre a pagar sus deudas.
Crítica
Comedia y fantasía con un niño en personaje fuera de contexto enfrentado a fuertes luchadores en un concurso de la WWE, clave de David contra Goliath.
La película, conocida también como “La Pelea Estelar”, no tiene pretensiones, es sencilla, previsible, y aborda, en un proceso de superación, temas sobre incomunicación familiar, acoso escolar o autoconfianza, con inversión de estereotipo al convertir a un chaval en superhéroe de la lucha.
Mientras compite y se va haciendo fuerte en el colegio, valorando la amistad con muchos lugares comunes de instituto, la abuela aporta gracias con su pretensión de influencer, y su padre, tristón, plano, se evade de sus penurias en el trabajo.
El final es chusco, el antagonista (el representante de Samson) es insufrible, y el tratamiento a sus asuntos no tiene originalidad, pero se deja ver como pasable entretenimiento familiar.