Crítica
Una de las sensaciones pop en Norteamérica de estos últimos años es Alvvays, grupo canadiense procedente de Toronto.
El eje de ese éxito es la rubia Molly Rankin, cantante, guitarrista, compositora y productora de sus discos, letrista de enjundia en tonos melancólicos, introspectivos.
Instrumentalmente suenan a dream pop, a jangle pop, a new wave, a psicodelia…
Escuchemos su tercer disco, “Blue Rev”, una colección de canciones cortas (ninguna de más de 4 minutos, bastantes de 2).
Se abre con “Pharmacist”, empleo de una situación cotidiana para tratar un regreso a casa.
Muro de sonido a lo shoegazer con juegos vocales y un progreso melódico pop de nueva ola envuelto en dulzura.
No trasciende, pero se deja escuchar.
Con “Easy On Your Own”, Molly aborda la desorientación en vísperas de una edad madura.
Toma de responsabilidades.
Variantes de tempo en un dream pop con la densidad habitual en los arreglos de esta banda.
No está mal.
Su influencia jangle pop es patente en “After The Earthquake”.
Guiños a Haruki Murakami con metáforas de ruptura amorosa.
Coctelera de REM, los Smiths y el Paisley Underground en esta pieza rítmica, melódica.
Se acuerdan de “Tom Verlaine” en la canción homónima.
El miembro de Television como título de una sofisticada pieza con intro lenta y evolución en medio tiempo con eco de New Order.
Vuelve el repique guitarrero en la rítmica “Pressed”, enérgico, agitado pop guitarrero también a lo Smiths que podrían grabar en los 70 Blondie o en los 80-90 Throwing Muses.
“Many Mirrors” trata el paso del tiempo, el reflejo de los matices personales… no puedo creer que seamos los mismos.
Luminosa pieza con estribillo pegadizo.
Uno de los mejores cortes del disco es “Very Online Guy”, ironía sobre el uso de las redes sociales.
Cuidados arreglos, densidad, reverb, sintetizadores… influencia new wave y psicodélica en modo baile.
“Velveteen” tampoco está mal.
Molly y la infidelidad en un sonido dream pop/nueva ola con la voz seductora de su autora.
Para escuchar junto a singles de Valerie Dore.
Elegancia, sofisticación pop lounge en la balada “Tile By Tile”.
Hermosa, con crescendo.
Sensibilidad, ternura.
Superando timideces… quita el pie del freno… en la intensa “Pomeranian Spinster”, contraste de la pieza anterior con un pop punk que podrían grabar las Shonen Knife, incluso Veruca Salt.
Buen tema.
Se acuerda de Belinda Carlisle en “Belinda Says”, un pop-rock demasiado FM.
“Bored In Bristol”, medio tiempo pop, se centra en esperas románticas, aburrimientos aguardando momentos de pareja…
Destaca el uso del bajo marcando el ritmo y acompañado por mareas de sintetizadores.
La balada “Lottery Noises” no destaca con un pomposo tramo final y la coda “Fourth Figure” luce orquestación y voz en 1 minuto y medio para enfatizar con clase un sentir romántico… todavía te espero.