Dirección: Carlo Ludovico Bragaglia y Vittorio Cottafavi.
Intérpretes: Louis Jordan, Sylvia Simms, Nicole Courcel, Jean Chevrier.
Con guión de Luigi Emmanuele (“Te Doy Mi Vida”), Léo Joannon (“El Hombre De Las Llaves De Oro”) y Pierre O’Connell (“Sambo”).
Sinopsis
La República Romana está amenazada por una coalición de ejércitos formada por etruscos, liderados por Porsenna (Jean Chevrier), mercenarios griegos, con Stravos (Renaud Mary) a la cabeza, y bárbaros, encabezados por Drusco (Louis Jordan).
Porsenna decide decretar una tregua que no desea ni su mujer, Lucilla (Nicole Courcel), que ha sido torturada por los romanos, ni el griego Stravos.
Ambos conspirarán para retomar la guerra tras la captura como rehenes de unas guerreras romanas lideradas por Clelia (Sylvia Simms).
Crítica
Péplum del montón que se basa en una novela de Luigi Emmanuele (también guionista) y Gaetano Loffredo.
Se ambienta en la Roma de la época de la República con un Louis Jordan como imposible bárbaro en cuitas románticas con Sylvia Simms, líder de una especie de amazonas romanas de buen ver que sacan su garra en su tramo final.
En situaciones de guerra y tregua, unos son muy malos, otros la mar de buenos, destacando un gallardo Jordan con algunas frases irónicas y comienzo fruta.
No falta el romance de este tipo de productos formulistas y previsibles, ni los insidiosos de turno, en este caso Renaud Mary, con la cizaña siempre a punto; y la bella Nicole Courcel, en plan odio vengativo por ser torturada por los romanos.
Michel Piccoli aparece en un breve papel y el personaje de Ettore Manni, como el tuerto Horacio, está desaprovechado.
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