Dirección: George Stevens.
Intérpretes: Montgomery Clift, Elizabeth Taylor, Shelley Winters, Raymond Burr.

Película basada en una novela de Theodore Dreiser (“Una Tragedia Americana”, Editorial Punto De Lectura). Con guión de Harry Brown (“Arenas Sangrientas”, “La Cuadrilla De Los Once”) y Michael Wilson (“El Puente Sobre El Río Kwai”, “Lawrence De Arabia”).

Sinopsis

Después de trabajar como botones en un hotel de Chicago, el ambicioso George Eastman (Montgomery Clift) consigue ocuparse en la fábrica de trajes de baño de su adinerado tío (Herbert Heyes), comenzando en la sección de empaquetado.
Allí conoce a Alice Tripp (Shelley Winters), otra trabajadora con la que da inicio a una relación que termina en un embarazo no deseado.
Antes de conocer esta última noticia, George ya se había enamorado de Angela Vickers (Elizabeth Taylor), una atractiva joven de la alta sociedad que, sin conocer el embarazo ni la relación de Eastman, quiere presentar a George a su familia en su casa junto a un lago.

Crítica




George Stevens ganó el premio Oscar a la mejor dirección adaptando en esta película una novela escrita por Theodore Dreiser que basó en un hecho criminal real.

El film, centrado en un magnífico Montgomery Cliff aportando su faceta atormentada al personaje protagonista, es intenso, tanto en su aspecto romántico, con apasionados encuentros íntimos con fondo de diferencia social-cultural y triángulo amoroso fatalista; como en sus rasgos de inquietud psicológica, con estéticas “noir” en los encuadres y uso de luces y sombras en la fotografía de William C. Mellor; o en las secuencias de drama judicial, sin chácharas, ágiles, contundentes.

Es un notable melodrama que nunca pierde interés, y muestra suficiente ambigüedad como para no caer de forma básica en una historia de arribismo con moralina simplona.

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Montgomery Clift
Elizabeth Taylor
Shelley Winters
Raymond Burr