• Por Rita Lorenzo

isabel allende la casa de los espiritusCrítica

Crónica de una saga familiar que sirve de pretexto para recrear con acierto los cambios sociales, políticos y económicos de un país.

“La Casa De Los Espíritus” es una novela de Isabel Allende en la que el pasado y el futuro se entrelazan; en donde el presente aparece como un espejo en el que todo puede ocurrir y ser visionado; en donde el tiempo desaparece para convertirse en un paseo por la vida; y en donde cualquier objeto, por inverosímil que sea, puede tener vida propia.

Es una historia enclavada en el realismo mágico en la que conviven en una misma dimensión humanos y espíritus, percibiéndose la lucha por la libertad, los ideales y la tiranía del hombre. Pugna enconada por las féminas que en ella aparecen.




Los Trueba, una dinastía familiar que crecerá con el paso de los años, que se fortalecerá y llegará a ser una de las familias más importantes de un país sin nombre de Latinoamérica, vive a través de sus protagonistas el declive de toda una época y vida.

De la mano de Esteban Trueba, claro exponente del terrateniente, rico hacendado y representante del machismo más puro; de Clara, su mujer, toda sensibilidad, compresión, ternura, discreción y fortaleza que da unidad a la familia; de sus hijos, tanto legítimos como naturales, así como de los acontecimientos de la evolución social del entorno, dan como resultado una serie de difíciles relaciones familiares que, marcadas en su mayoría por el drama y lo sobrenatural, desembocan en un emotivo final sorprendente con conducción a la reconciliación con los antepasados.