• Por Antonio Méndez

Sinopsis

Madrid, año 1936.
Un crítico de arte inglés llamado Anthony Whitelands llega a la capital de España para autenticar un cuadro propiedad de un amigo de José Antonio Primo de Rivera cuyo valor económico puede ser clave para favorecer un crucial cambio político.

Crítica




eduardo-mendoza-novelas-rina-gatos-criticaEduardo Mendoza ganó el Premio Planeta con este libro con ágil narración omnisciente en tercera persona que mezcla una trama de conflicto sociopolítico en ambiente prebélico; el típico delirio conspiranoico de best-seller adornado con fabulaciones y/o didacticismos artísticos y con la presencia de una organización “secreta” (o incómoda al poder establecido) de singularidad estética-ideológica regida por un líder carismático; vínculos románticos a cada cual más improbable; y momentos de película formulista de acción de Hollywood estilo Jerry Bruckheimer.

La conformación de situaciones, ambientes y personajes se mueven entre el disparate, lo acartonado, lo anecdótico, el “guadianismo” de caracteres y lo superfluo.




En el aspecto político se esfuerza por ofrecer objetividad y humanización a diversos personajes históricos, aunque no puede evitar caer en la reflexión demagógica y superflua, el estereotipo con raíz en filias y fobias, la caricatura o el efectismo. Las ligazones románticas son absurdas, un despropósito de precipitación afectiva con conclusiones risibles.
A pesar de lo dicho, la lectura es ágil, fácil, y el cóctel no aburre si no se toma demasiado en serio.

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