Sinopsis
Kaspar Almayer es un holandés que intentó enriquecerse en Borneo, pero terminó casado con una malaya, hija adoptiva del capitán Tom Lingard, en un matrimonio infeliz y con una hija mestiza, Nina, que ha vuelto junto a sus padres tras criarse en Europa.
Junto al río Pantai, Almayer construyó una casa destinada a recibir a los ingleses, que no llegan… A la casa, los lugareños le llaman “La locura de Almayer”.
Crítica
Después de correr aventuras como marinero por medio mundo, Joseph Conrad se estableció en Inglaterra, se nacionalizó británico, y debutó como novelista en el año 1895 con “La Locura De Almayer”, una infravalorada historia que adelanta algunos temas básicos de sus mejores libros, en especial de “El Corazón De Las Tinieblas”.
El protagonista es Kaspar Almayer, un holandés, un ambicioso hombre blanco en lugar exótico cuya fortuna es aciaga.
Su matrimonio es una desgracia, su mujer malaya le desprecia; su hija, aunque le quiere, busca afecto fuera de “la locura”; y sus ansias de mejora agonizan en un escenario de jungla multicultural.
Aunque interpretada como una alegoría colonialista, “La Locura De Almayer” es más bien una obra existencial sobre un personaje fracasado, hundido, anímicamente destrozado, cuyo legado se escapa, en presente y futuro.
Narrada en tercera persona, la novela, como suele ser usual en Conrad, destaca por la atmósfera asfixiante, opresora, del entorno natural, que, como un personaje más del libro, ahonda en el retrato psicológico del “perdedor” que, aunque con tramos confusos, desordenados, logra momentos de rara intensidad.
La derrota en el olvido, en la evasión en el opio… ven, amigo Jack… el pequeño mono colgado del hombro, fumando con el amigo chino, apoyado pensativo en la balaustrada… El fuego y los rescoldos.
La desilusión en la casa del deleite celestial. Y le llaman locura.