Sinopsis
Inglaterra, año 997.
En un tiempo de conflictos convulsos con poderes corruptos dirigiendo e país, Ragna, la hija de un noble normando que llega casada a una nueva tierra; Edgar es un fabricante de barcos que ha sufrido un ataque vikingo, y Alfred un monje idealista con aspiraciones de convertir su abadía en centro cultural.
Crítica
Este libro es la precuela de la exitosa épica medieval de Ken Follett, “Los Pilares De La Tierra”, y una novela muy larga que básicamente repite la fórmula del libro citado pero modificando nombres.
Los ambientes, los motivos y las acciones son muy similares.
El principal error de la novela es el enfoque simple, infantil, de configurar conflictos en un retrato de personajes muy maniqueo, plano, de un período histórico, con conflictos muy poco originales sobre asuntos románticos y de poder.
Los personajes protagonistas tienen todas las virtudes, con sus luchas por derrotar la injusticia, por lograr sus objetivos, para enaltecer su fortaleza y valentía; y los antagonistas todos los defectos, son malos hasta decir basta, corruptos, crueles, despóticos.
Para Follett no parece haber término medio ni más matices para crear la historia ni para trasladar sus mensajes, por otro lado bastante simples en cuanto a su visión social y política.
El ritmo narrativo es suficientemente ágil, la documentación del período la exigida, hay secundarios variados, pero las tramas que describe caen en lo mismo, en una simpleza y previsibilidad que difícilmente sustenta el interés en un volumen tan extenso.