Mucho ruido y pocas nueces. Este es el pensamiento que siempre me viene a la cabeza cada vez que escucho este disco. Es indudable su importancia en el noise pop, el dream pop y el llamado shoegazing, además de su condición de modelo e inspirador de muchos artistas similares surgidos con posterioridad. Pero la verdad es que al margen de puntuales aciertos melódicos y atmosféricos, parece como si la banda irlandesa pretendiese disfrazar carencias compositivas y su falta de capacidad para construir buenas canciones pop bajo la anarquía de un pesado muro de guitarras distorsionadas y efectos disonantes que por momentos solapan sus voces frágiles, susurrantes, casi imperceptibles.

En mi opinión se trata de un trabajo bastante sobrevalorado y pretencioso que alterna algunos pasajes fascinantes con otros difícilmente soportables.

Canción favorita del disco: Only Shallow

JaBerMen