• Por Javier Platas

the arcs portada yours dreamilyCrítica

Dan Auerbach, cantante, guitarrista y principal compositor de los Black Keys, debutó con este disco al frente de este proyecto paralelo llamado The Arcs.

Le acompañan en esta nueva aventura competentes músicos entre los que se encuentran Leon Michels (también co-productor del disco), Nick Movshon o Richard Swift.

Todos ellos son integrantes de otras bandas de funk y soul como El Michels Affair, The Mighty Imperials o Pony Express.

A destacar también las colaboraciones de la cantante soul Lee Fields (a quien se puede escuchar en “Nature’s Child”) y del grupo femenino de mariachis Flor De Toloache (quienes realizan apoyos vocales en “Put a Flower In Your Pocket” y en “Pistol Made Of Bones”).




La totalidad de temas están co-escritos por todos los miembros de la banda, lo que nos hace pensar en un trabajo menos personal de lo que podría parecer en un principio, aunque es evidente que las riendas del proyecto las conduce un Auerbach que se aleja bastante del estilo blues-rock y garajero de los Black Keys para abrazar sonidos más funk, soul y psicodélicos sin perder su esencia rockera.

Son manifiestas las influencias del soul clásico y especialmente del denominado ‘Philadelphia Soul’ de los 70.

Es un trabajo convincente aunque un tanto desigual en el que conviven algunos momentos excitantes con otros poco definidos que parecen no ir a ningún sitio.

Tampoco ayuda una producción demasiado recargada, llegándose incluso a escuchar gratuitos arreglos hip-hoperos y efectos sonoros que no aportan nada ni ayudan a realzar la calidad de las canciones.


Lo mejor de “Yours, Dreamily” lo hallamos en composiciones como “Outta My Mind”, sin duda uno de los mejores cortes del álbum en el que se conjuga con talento el funk con el garage-rock sobresaliendo un contagioso estribillo, o “Stay In My Corner”, una sofisticada pieza de gran clase y elegancia que firmarían gustosos en su día Marvin Gaye o Curtis Mayfield.

La sensual “Cold Companion” brilla en sus texturas funk con destacado solo de guitarra y un excelente bajo interpretado con personalidad.

“Chains Of Love” es un movido tema de estimulante combinación instrumental en el que queda patente un gran sentido del ritmo, mientras que “The Arc” les emparenta más con el sonido garajero de los Black Keys con Auerbach haciendo sonar su guitarra fuzz distorsionada y Leon Michels dándole al órgano Hammond.

Otra de las cumbres del disco la encontramos en “Rosie (Ooh La La)”, fascinante canción de soul psicodélico agraciada con una fantástica melodía.

En definitiva, un interesante debut que a pesar de sus defectos conforma una plausible propuesta y una nueva vuelta de tuerca en la carrera del inquieto Dan Auerbach.