Crítica
El grupo escocés Travis con lo que sabe hacer en 10 canciones pop-rock, bonitas melodías, buen trato vocal, tono melancólico, arreglos cuidados…
Fran Healy trata una ruptura en “Waving At The Window”, medio tiempo con pegadizo piano en envolvente y agradable sonido, evocativo, con uso de falsete.
Un soft rock con armonías vocales que podrían grabar Coldplay o Keane.
Romanticismo a dúo con Susanna Hoffs (de Bangles) en “The Only Thing”, corte lento con piano, aromas folk country, cuerdas, un bajo destacado y voces laxas, sensuales.
“Valentine” es la pieza más disonante del álbum, con guitarras más duras, también en tempo lento, y prominentes armonías en coros.
Una especie de folk blues.
“Butterflies” es como un soft rock 70s estilo trío America o a los grupos folk rock/jangle pop de la California de finales de los 60 y comienzos 70.
Grata melodía en medio tiempo con un excelente puente… persiguiendo mariposas sobre el agua.
“A Million Hearts” tiene un piano en la intro en un progreso de balada romántica con falsete y juego vocal.
La sensibilidad melodía es palmaria, similar a la de los citados Keane.
La pieza más animada del álbum es “A Ghost”, con dinámica batería y rasgueos acústicos en la guitarra.
Base folk pop con trazos rockabilly en partes rítmicas y Healy en encuentro espectral… vi un fantasma acercándose en el espejo…
Frágil, quebradiza como un joven Neil Young, en “All Fall Down”… una balada folk desnuda, de voz somnolienta.
Notable melodía.
La pieza de arreglos más interesantes es “Kissing The Wind”, con la acústica acompañada por arreglos orquestales y buenas variantes melódicas y de registro vocal.
Estupendo estribillo.
En la balada “Nina’s Song” retoma las pautas de equilibrado pop orquestal con dulces arreglos vocales.
Gustará a los que escuchen a Coldplay, a… Keane.
Terminan estas diez canciones con “No Love Lost”, romanticismo delicado con piano. Emocional.
Una pena tanta monotonía en tempos. Una lástima.