Crítica

El británico Jake Bugg se reveló hace casi diez años con un buen disco que tenía como influencia tanto el folk como el blues, el rock garajero o el rockabilly.

En su trayectoria, con productores como Rick Rubin o Dan Auerbach (de los Black Keys), fue incorporando sonidos pop, incluso dance, con los que diversificar sus composiciones.

Steve Mac y Andrew Watt son los productores principales de “Saturday Night, Sunday Morning”, su cuarto álbum.
Vamos a escucharlo…

“All I Need”.
El de Nottingham dice que le llames cínico pero original. Quiere encajar en un mundo digital. Pero todo es pose, ya que lo que quiere realmente es amoldarse a lo que sea para pasarlo bien “esta noche”, “es nuestro momento”. Se supone que el “Saturday night” del título.
Instrumentalmente es una melódica pieza pop de baile, con algún aire latino en el riff, estribillo himno y coros femeninos que le aportan dosis soul-góspel.

En “Kiss Like The Sun” retoma el ritmo rápido de sus inicios con variantes de tempo, punteos blues, base rockabilly, toques folk, aplausos…
El festivo Jack Bugg en un pasable rock de raíces. El de hace años.

“About Last Night”… perdí mi cabeza, estaba celoso…
El gran momento se ha revelado un fiasco y la pareja del muchacho se ha pirado… no me dejes.
Son las siete de la mañana y no puede ni respirar.
Es un pop de desamor bastante flojo. Ni chicha ni limoná.

Mucho mejor es “Downtown”, gran balada.
El piano de Jamie Hartman es memorable y Davide Rossi mete arreglos de cuerda, con la voz nasal-aniñada de Bugg muy efectiva en la transmisión emocional.
La melodía es magnífica… ayúdame, todo se mueve muy rápido, nunca estarás sola, escucha mi llamada.
Estupendo corte lento, la única pieza del disco producida (y co-escrita) por el propio Jamie Hartman.




“Rabbit Hole” tampoco está mal.
Se inicia como balada y posee variantes de pop bailongo con falsete.
A destacar su texto, enigmático, de pop psicológico, desorientación, angustia… me estoy colocando, encuéntrame en la esquina, hay un castillo mágico en mi cerebro, búscame en la madriguera…

Más dance con “Lost”, pegadiza canción de influencia disco-funk.
En plan ABBA con Jake en busca de la moza perdida… nunca he estado tan perdido, siempre estás en mi mente…

En “Scene” relaja la instrumentación, el tempo.
Balada folk con sonido acústico.

“Lonely Hours” devuelve el dinamismo al disco.
Es una canción pop new wave de mérito, co-escrita entre Hartman y Bugg, con intenso ritmo, y un estribillo fenomenal, fácil y contagioso.

El pop de comienzos de los años 60 parece influir a “Maybe It’s Today”, balada al estilo Gene Pitney o Phil Spector…
Bugg se fija en una atractiva muchacha, la mira, la ve, pero ella ni caso, ni sabe que existe.

Con “Screaming” se retoman ascendencias de nueva ola, entre los Franz Ferdinand del año 2004 y los Duran Duran de 1984.

Cierra con una plausible balada, “Hold Tight”, punteos folk en tono de nostalgia… el tiempo se mueve rápido y no vuelve… ¿cómo me recordarás?
Algunas piezas son bastante recordables.