• Por Antonio Méndez

tamaryn-cranekiss-albumCrítica

Tamaryn Brown es una neozelandesa afincada en California gustosa de sonidos dream pop, shoegazer, post-punk, tecno pop, que en su tercera entrega, “Crakeniss”, opta por adornar sus etéreas, melancólicas, elegantes melodías de ensueño con ejecución susurrante y una producción deudora del pop de sintetizadores de los años 80.

Rota su relación con Rex John Shelverton tras los dos primeros discos, su acompañante ahora es Shaun Durkan, líder del grupo Weekend con el que colabora en este álbum que tanto nos remite a los Cocteau Twins como a Slowdive, The Cure, Kate Bush, New Order o Madonna en texturas equilibradas que en ocasiones bordean la sobreproducción con Jorge Elbrecht (miembro, entre otros proyectos, de los Violens) en el estudio.



La canción que da título al disco, “Crakeniss”, es un notable medio tiempo dream tecno pop con resonancias del ensueño melódico de los Cocteau Twins o del sofisticado sentimentalismo de los Cock Robin en un ambiente de apetito romántico, casi de sumisión sexual.

“Hands All Over Me” subraya el hedonismo, la apetencia en la lubricidad coital de Tamaryn en una canción con intro a lo Depeche Mode de comienzos de los años 80 en progreso hacia la Madonna de la época “True Blue” y similares… haz lo que me gusta… nunca voy a cambiar…

“Last”… ¿la relación se acaba o continúa?… Uso de falsete en este tolerable cruce entre la new wave de Blondie y el art pop de Kate Bush. Todo muy 80’s.


tamaryn-fotoEl medio tiempo “Collection”, con empleo de guitarras acústicas, destacada percusión, ecos de The Cure y New Order… Termina hastiando a causa de su falta de dirección y reiteración. Todo sea por la atmósfera.

El dream pop “Keep Calling” es tan dulce como melancólico. Suficiente equilibrada esta balada de sintetizadores aunque le sobra por lo menos un minuto.


“Softcore” es el tema más disfrutable de “Cranekiss”. Oscura, aunque optimista, canción inspirada en el post-punk gótico… sabes que debes confiar en mí… vivencias bajo la lluvia, toques dance y noise con un trabajo plausible en arreglos… Buen remedo de The Cure.

“Fade Away Slow” es otro corte meritorio. Lento. Como una marcha lánguida funeraria de punzante percusión. Envolvente. Buen uso de la voz dulce en contraste con el tono taciturno.

Menos satisfactorias son las tres últimas canciones. “I Won’t Be Found” termina siendo cargante con su recarga de sonidos. “Sugar Fix” es una azucarada melodía pop que fusiona sin trascendencia a New Order con los Cocteau Twins. “Intruder (Waking You Up)” carece de dirección y se subyuga a la atmósfera. Cansina.