• Por Antonio Méndez

wolf-parade-discos-cancionesCrítica

Disco de los canadienses Wolf Parade, un subestimado conjunto de Montreal que merece mayor atención de la que normalmente recibe.

Tras la salida del bajista Dante DeCaro, el ahora trío manifiesta el talento de sus dos compositores y cantantes, Dan Boeckner y Spencer Krug (acompañados por el batería Arlen Thompson), para crear historias atmosféricas, oscuras, taciturnas, con textos de calado literario y estilosas melodías con huellas new wave, post-punk, glam… sonando a David Bowie o Roxy Music.

El álbum, producido por John Goodmanson, se abre con “Under Glass”, una canción escrita por Boeckner.
… como si fuera ciencia-ficción, estamos encerrados en una urna de cristal, ya no recuerdo como era la vida fuera…
Mentes envenenadas.
El tema, con influencia manifiesta del cineasta David Cronenberg, crea una distopía que cruza en tono de agustia y búsqueda de libertad a Roxy Music con Joy División.
Ritmo rápido, hipeo, sonido melódico, angular, con buena mezcla de guitarreo y sintetizador.

La primera canción de Krug es “Julia Take Your Man Home”, uno de los mejores cortes del LP excelentemente arreglado.
Envolvente, pegadizo riff, con un progreso intenso de crooner abatido, elegante, con estilo.
La apasionada voz de Spencer narra la historia de una mujer y su amante, abatido por sentirse culpable por la la ruptura, consumido en el alcohol… llévalo a casa, acuéstalo en una cama de espinas, él te dirá que lo siente….
Espera a mañana por la mañana.
Entre los Human League y Roxy Music.




wolf-parade-thin-mind-critica-reviewDan Boeckner, con “Forest Green”, continúa la intensidad rítmica de este primer y magnífico inicio de disco.
Aquí en un tecno pop maníaco, oscuro; pensemos en A Flock Of Seagulls o en los primeros Tears For Fears.
Soledad, escapismo en el bosque verde, donde la vida es tranquila.
Todos los días son iguales en este lugar maldito.

El tempo se calma, pero con intensa instrumentación, en “Out Of Control”, composición de Krug con dejes teatrales, dramáticos, a lo Bowie, tando de la etapa plastic soul como glam.
También recuerda a Suede.
No sentir, perder el control, huir a un lugar desconocido.

Dan Boecker canta y compone otro de los mejores momentos del álbum, “The Static Age”, tema de gran elegancia estilo Roxy que conjuga con talento la energía con la melodía.
Es un medio tiempo con referencias al escritor Marcel Schwob.
Boecker no quiere vivir en una era estática, quiere cambios, movimiento.

Un piano inicia la balada “As Kind As You Can”, con Krug pidiendo comprensión, amabilidad, en un enfoque dramático a lo Bowie.




wolf-parade-fotos-thin-mind-critica-reviewTambién es de Spencer Krug “Fall Into The Future”, un corte psicotribal, en plan baile mantra.
Demasiado repetitivo. Se hace pesado.

Boecker escribe “Wandering Son”.
Intro Phil Spector y progreso de formulismo new wave, más aburrida y sin la altura melódica de otras piezas del álbum.



La mejor canción del disco es la única composición co-escrita por Boecker y Krug, con voz principal de Dan y Spencer en el puente (sus voces son parecidas), “Against The Day”, romanticismo gótico-oscuro en plan tecno pop/new wave de los primeros Depeche Mode.
Vampiros… nuestro único delito fue vivir más allá de nuestro momento…
Condenados… estamos perdidos en los mapas…
Temazo, con textos de entidad, un inmejorable sentido de la atmósfera, del ritmo, de la melodía.

El cierre de “Thin Mind” es “Town Square”, corte de Krug, con manierismo vocal, teatral, mezclando dramatismo glam con intenso ritmo post-punk.
Buscando la luz, si no morimos jóvenes, envejeceremos y moriremos.
No hay otro destino.