• Por Javier Platas

bryan-adams-get-up-album“Get Up”, el decimotercer álbum en estudio de Bryan Adams, ha hecho posible una curiosa asociación entre el rockero canadiense y Jeff Lynne, el líder de la Electric Light Orchestra (ELO) y productor de discos para gente como George Harrison, Paul McCartney, Tom Petty o Traveling Wilburys.

Aquí también ejerce de productor, músico y ocasional compositor. Eso sí, Adams ha vuelto a contar con su habitual colaborador Jim Vallance como co-escritor de casi todas las canciones del disco.

La movida “You Belong To Me” abre fuego en forma de bailable pieza rockabilly de contagioso estribillo.

Le sigue “Go Down Rockin'”, un rocoso tema de mayor protagonismo guitarrero y típica voz rasposa en el que Adams afirma que nadie va a decirle lo que tiene que decir o hacer y que si se va a hundir lo hará rockeando. Sí señor, toda una demostración de personalidad y honestidad rockera.

“We Did It All” es una pasable y melódica balada romántica que reúne todos los elementos reconocibles de las viscosas producciones de Lynne.

Vuelve el ritmo con la magnífica “That’s Rock And Roll”, sin duda de lo mejorcito del disco. Sentido homenaje al rock and roll con referencias en el texto a Buddy Holly y a Elvis en este pop-rock de influencia clásica con palmas, pegadizos coros en el estribillo, buen sentido del ritmo y efectivo solo guitarrero a mitad de tema.

bryan-adams-get-up-fotoDe nuevo la mano claramente pop de Lynne vuelve a dejarse ver en el medio tiempo “Don’t Even Try”, una composición que incluso puede recordar en su sonido al Roy Orbison de “Mystery Girl” (1989), el último y póstumo disco del gran cantante y compositor estadounidense que igualmente estaba producido por Jeff Lynne.

El propio Lynne además de producir también participa junto a Adams en la composición de “Do What You Gotta Do”, un sencillo y disfrutable tema con un buen tratamiento melódico, rítmico y vocal.

“Thunderbolt” es estupenda. Un estimulante temazo de adhesivo estribillo, potentes guitarras y un estupendo trabajo en arreglos.

Bryan Adams ya había demostrado anteriormente en su carrera sus dotes para las bonitas baladas de fácil asimilación por parte del gran público, algo que aquí vuelve a dejar claro en “Yesterday Was Just A Dream”, preludio de otro de los puntos destacados de este trabajo: “Brand New Day”, una notable composición que recupera la esencia heartland rock de sus inicios aunque tamizada por la producción pegajosa-pop de Lynne.

A partir de aquí “Get Up” se completa con cuatro versiones alternativas en formato acústico de otros temas previos del disco, algo que al margen de sugerir una falta de suficiente material digno para rellenar el álbum, no aporta nada especialmente relevante a no ser la curiosidad que supone escuchar las mismas canciones con una sonoridad básica y desnuda.