• Por Javier Platas

deep purple fireball cover album portada critica reviewCrítica

Aunque inferior a otras indiscutibles obras maestras como “In Rock” o “Machine Head”, este meritorio álbum se encuentra entre los destacados de la discografía de Deep Purple.

Tras sus plausibles inicios en el rock psicodélico y progresivo a finales de los años 60, y asentados ya sin perder querencias progresivas en el contundente hard rock y blues rock con clara influencia en el posterior desarrollo del heavy metal, el grupo alterna en este disco (dentro de un conjunto un tanto irregular) algunos clásicos ineludibles de su repertorio como la propia “Fireball”, “The Mule” o “Strange Kind Of Woman”, con otros temas quizá no tan reconocibles pero de igual o superior valía artística que los anteriores como son los extraordinarios “Fools” y “No One Came”.

Sobresale la poderosa capacidad vocal de Ian Gillan y sobre todo la inconmensurable labor instrumental del guitarrista Ritchie Blackmore y del teclista Jon Lord, puntales básicos de esta mítica formación británica.