• Por Antonio Méndez

kurt vile album review wakin on a pretty daze cover portadaCrítica

Kurt Vile, compositor con influencias folk rock, power pop y psicodélicas, logró con este disco, “Wakin On A Pretty Daze”, ensanchar su audiencia internacional. Producido por John Agnello, el álbum se compone de largas piezas que en ocasiones remiten a Lou Reed, más tarde a Neil Young, en ocasiones al Beck en su faceta acústica o al soft rock del escocés Al Stewart.

“Wakin On A Pretty Day” se extiende por más de nueve minutos en una relajada, melódica, luminosa pieza con mezcla acústica y eléctrica, guitarra de doce cuerdas, sutiles sintetizadores y la mezcla referida de soft rock californiano, pop lisérgico y folk rock.
El progreso del tema suena como un cruce entre el Neil Young de “Zuma” y los discos soft rock de Al Stewart.

Más corta es “KV Crimes”.
Es una canción en medio tiempo con riff blues rock y resonancias de Lou Reed.




“Was All Talk” es un atmosférico tema de más de siete minutos.
Emplea elementos electrónicos con rock de raíces y esencias jangle pop/folk rock psicodélicas que recuerda a las guitarras de Love en “Forever Changes” y también al Marc Bolan folkie antes de convertirse en glam con T. Rex.

En “Girl Called Alex”, notable canción que, como todas las de este disco, muestra el talento melódico de su autor, retiene sonidos de Love en una sugerente conjunción entre Arthur Lee, Al Stewart y Lou Reed con la Velvet Underground.



El single “Never Run Away”, otro de los momentos breves del álbum, es un escuchable pop psicodélico con toques folk e inspiración power pop, directo y de tono optimista
… sé que nunca te irás, mis penas han pasado al conocerte…

“Pure Pain” es un rítmico folk rock con variantes tempo y sonido californiano (a pesar de que Vile es de Philadelphia).

Más de ocho minutos dura la confesional balada “Too Hard”.




kurt vile wakin on a pretty daze review album fotos images“Shame Chamber” es más rítmica, un medio tiempo pop-rock con cowbell de Stella Mozgawa, arreglos de cuerdas y pegadizo ritmo.

“Snowflakes Are Dancing”, con voz narcotizada a lo John Lennon, es un pop psicodélico con repique acústico a lo Jayhawks y densos arreglos con uso de sintetizador.
Se encuentra entre lo más rítmico dentro de un álbum de tempos mayoritariamente tranquilos.

“Air Bud” es un melódico corte con ascendencias del sonido Madchester en una lisergia con wurlitzer y fuzz.

Cierra el disco con “Goldtone”, más de diez minutos con vibráfono, slide guitar, evocaciones casi caribeñas y similitudes vocales con Lou Reed.

Puntuación

AlohaCriticón:
Usuarios:
[Total:8    Promedio:4.2/5]

Tú también puedes votar. Desliza el ratón por las estrellas verdes para dejar tu puntuación

Te puede interesar