Crítica
“Kind Heaven” es el segundo disco acreditado como solista de Perry Farrell, el líder de Jane’s Addiction, la influyente banda rock de Los Angeles.
Este álbum, con producción del veterano Tony Visconti, el célebre colaborador técnico de T. Rex y David Bowie, poco o nada tiene que ver con el sonido de “Nothing’s Shocking”, es un trabajo pop con arreglos orquestales y con la mujer de Perry, Etty Faul Perry, aportando voces en temas de discoteca.
La parte más rock del LP es la primera, con cortes como la apertura, “Red, White And Blue (Cheerfulness)”… pieza animosa sobre un nuevo mundo y caos político… la Constitución no se ha roto, el rock es lo primero…
Mezcla soportable de glam, boogie y garage rock.
Lo más cercano a la etapa Jane’s Addiction es “Pirate Punk Politican”.
Suena a reciclaje en riffs y estructura con su típica base hard funk rock, algún elemento electrónico y un texto de independencia individual ante la colectivización política y la propaganda mediática.
… no necesito permiso de nadie… queréis dividir al país…
Estoy con informaciones contradictorias.
Una intro a lo Gary Glitter en “Snakes Have Many Hips”, corte que progresa con trazos jazz, cabareteros, arreglos de cuerda….
La serpiente se arrastra, influye, muerde con colmillos brillantes…
Pretensión art rock a lo Sparks que no convence.
La mejor canción del disco es la hiperpegadiza “Machine Girl”.
Pelotazo pop de influencia new wave sobre sexo deshumanizado, con su mujer Etty metiendo voces.
… háblame, chica máquina, tu voz es dulce y plástica, quiero hacer el amor contigo…
A partir de aquí, Perry se pone romántico.
“One”.
… ¿soy yo el único para ti?… para mí tú eres la única, guardo fotos sonriendo juntos…
Farrell en modo vocal Bono junto a Etty y arreglos pomposos de Visconti.
Insoportable, como si Cyndi Lauper colaborase en la parte final de los años 80 con U2.
“Where Have You Been All My Life” tampoco es lo mejor que ha grabado su autor.
Ritmillo de baile y guitarreo hard rock con acentuación instrumental en la percusión.
Un comistrajo olvidable.
… estoy confuso, ¿ya no me amas?
Desesperado, con el corazón roto.
“More Than I Could Bear” no es que sea para tirar cohetes, pero por lo menos es melódica, suficientemente intensa, los arreglos orquestales están equilibrados.
Escuchable.
Etty Lau Farrell es la voz principal de “Spend The Body”, un dance pop al estilo del formulista contexto radiofónico del momento.
… me mantienes con calor, estoy caliente…
Poniendo el cuerpo a tono, ponlo cachondón.
Termina “Kind Heaven” con “Let’s All Pray For This World”, un cántico con piano, violines, coral, muy navideño…
Vamos a rezar por el mundo, por la seguridad en la noche, por purificar mentes, que lo escuchen los ángeles.
We are the world, we are the children.