• Por Antonio Méndez

surfer-blood-snowdonia-discosCrítica

Cuarto disco grande de Surfer Blood, un grupo de Florida con John Paul Pitts al frente que perdió en el año 2016 a causa de un cáncer a su guitarrista Thomas Fekete, sustituido por Michael McCleray, e incorporó a la bajista Lindsey Mills tras la marcha de Kevin Williams.

Se abre con “Matter Of Time”, pop rítmico, melódico, de herencia 60’s surf, beat, bubblegum, garage rock, jangle pop… no necesito flores, ni poemas cursis… mi amor es gratis… dinámica sección rítmica.
Una pareja se piensa sedudamente el casorio.




El sonido pop luminoso del inicio del álum continúa con “Frozen”, power pop con coros uuuu, voz dulzona, trazos angulares de influencia post-punk…. el ayer no importa, construiré un reino para nosotros dos.

La influencia del pop y el surf de comienzos de los años 60 es una de las principales referencias del sonido de Surfer Blood. No hay más que escuchar “Dino Jay”, la típica canción de recuperación del ánimo tras un desamor que comienza con sonidos rock para progresar en un animoso jangle pop de ritmo alegre.


surfer-blood-2017-foto-critica“Snowdonia” se vuelve más experimental en su tramo medio. Con “Six Flags In F Or G”… cogido en un concurso de meadas… estoy perdiendo un tiempo precioso… onirismo, tono surreal-paranoico… Psicodelia surf experimental con ritmo veloz rockabilly y armonías vocales a lo Mamas & The Papas.
La canción, parece que dedicada al fallecido Fekete, no quedaría mal en un disco de los West Coast Pop Art Experimental Band.

La pieza más larga del disco es el tema homónimo, “Snowdonia”, casi 8 minutos de rock progresivo en donde caben diversas texturas… sunshine pop, boogie rock a lo T. Rex, surf, folk rock/jangle pop, lisergia, percusión tribal… ya no me necesitas.
Atmosférica, estupenda pieza psicoprogresiva que nos lleva otra vez a ecos de West Coast Pop Art o a los Strawberry Alarm Clock.

Descansaré aquí un rato, quizá la eternidad…
“Instal Doppelgängers”, pop psicodélico de tema espectral y fondo de maraña guitarrero. Entre la lisergia de Tomorrow y el jangle pop flower power de los Turtles.

“Taking Care Of Eddy” se lo dedican a un pariente anciano de la novia de Pitts, al que tienen que cuidar desde niño cuando sufrió daño cerebral a causa de un accidente de tráfico. Es una psicodelia surf-garajera-bubblegum muy pegadiza con juegos vocales, tipo Cowsills, tipo Free Design.

“Snowdonia” termina con “Carrier Pigeon”, nostalgia, melancolía, posible evocación al cáncer de la madre de Pitts en un tema pop elegante, denso pero equilibrado.

Disco que gustará a los fans del pop 60s.