• Por Antonio Méndez

spiritualized songs in a e cover album portada discoCrítica

El ex Spacemen 3 Jason Pierce creó Spiritualized a comienzos de los años 90, un proyecto de pop psicodélico en donde tanto caben los Beach Boys del “Pet Sounds” como la Velvet Underground, Neil Young o el krautrock alemán. La sexta entrega de este proyecto británico está producida por el propio Jason Pierce, o J. Spaceman, seudónimo que define bien su gusto por las atmósferas etéreas-espaciales.

A pesar de tales fundamentos space-pop, este álbum de Pierce, quien ha estado bordeando la muerte tras una grave enfermedad respiratoria, está más cercano en ocasiones al espíritu de raíces del “Exile On Main Street” de los Rolling Stones que a otra cosa, sin olvidar los experimentos psicodélicos de Brian Wilson, Neil Young y la música góspel.

Predominantemente acústico, de tempos sosegados-reflexivos y con un aceptable trabajo en la creación suntuosa de atmósferas, la voz doliente-vulnerable de Pierce nos narra historias de espiritualidad, de romanticismo. Asistimos a mentiras de pareja, adicciones, almas ardiendo, y somos testigos de imágenes de muerte acechante tocando el violín.

En medio de varios ordenados rellenos “Harmony” con diversos instrumentos, hay espacio para “Sweet Talk”, canción con trompeta y cuerdas que parece cruzar el “Ave María” de Schubert con el gospel y el mimo en la producción y arreglos de los Beach Boys lisérgicos; para “Death Take Your Fiddle”, psico-folk y jazz con ecos de Lou Reed y Tom Waits en donde aborda el tema del alcoholismo y el consumo de drogas; o para “Sitting On Fire”, pieza lenta acústica con arreglos orquestales y estribillos-himno a lo Stones del citado “Exile”. Es una de las varias canciones del disco que dibujan escenarios melancólicos-ardientes.

spiritualized-foto-reviewOtros cortes del disco son “Soul On Fire”, tema acústico con coros angelicales (muy habituales en el álbum) y arreglos ostentosos de cuerdas que enfatizan el estribillo; la folk-pop “Baby, I’m Just a Fool”, pieza folk-pop con sonidos de marimba; o “Don’t Hold me Close”, balada casi country-folk cantada a dúo con Rachel Korine.

Más dinámicos se muestran en “I Gotta Fire”, corte con wah wah y resonancias de los Stones (o de Primal Scream imitando a los Stones); la psico-garajera “Yeah Yeah”, o “You Lie You Cheat”, principiada con acústicas de sabor español antes de la entrada del feedback y la psicodelia con sonoridad más rasposa, contraste adecuado con el grueso acústico y orquestal de un disco moderadamente escuchable.