Dirección: John Quinn.
Intérpretes: Betsy Russell, Leif Garrett, Lucinda Dickey, Lorie Griffin.
Con guión de David Lee Fein (“Macabra: La Mano Del Diablo”) y R. L. O’Keefe.
Sinopsis
Alison (Betsy Russell), una animadora que sufre extrañas pesadillas y que se muestra celosa ante los ligoteos de su novio Brent (Leif Garrett), se traslada a un campamento de entrenamiento de cheerleaders, lugar en donde comienzan a sucederse asesinatos.
Crítica
Mezcla de terror slasher y comedia sexual adolescente tipo “Porkys”.
Es un bodrio con el ex ídolo adolescente del pop Leif Garrett en plan macho alfa rodeado de chicas curvilíneas, algunas de ellas más tarde dedicadas al porno. Junto a Leif hay un orondo insufrible, tanto como Garrett, que se cree simpático, enseña el culo por la ventana de un coche, se echa algún pedo y no deja una cámara ni a tiros.
A la trivialidad sexual se le une una pretenciosa atmósfera de tormento psicológico y un poco de gore con un final de efecto sorpresa. Estética kitsch 80’s para un film olvidable.