Dirección: George Cukor.
Intérpretes: Marilyn Monroe, Yves Montand, Tony Randall, Frankie Vaughan.
Con guión de Norman Krasna (“Rica, Guapa y Casadera”).
Sinopsis
En Nueva York, Jean-Marc Clément (Yves Montad) es un multimillonario al que van a ridiculizar en una revista musical de teatro.
En principio tiene la intención de prohibir el espectáculo, pero más tarde, adoptando otra identidad, se une al reparto con la intención de conquistar a su protagonista, Amanda Dell (Marilyn Monroe).
Crítica
Marilyn Monroe hizo pareja en la Fox con el francés Yves Montand (tras la salida de Gregory Peck) en esta comedia romántica con contexto teatral.
Lo más destacado del film, iniciado en plan documental para fijar la riqueza familiar del protagonista y llamado en algunos países “La Adorable Pecadora”, son sus gratos números musicales y los cameos de Milton Berle, enseñándole comicidad a Montand; Bing Crosby, en un pasaje simpático de instrucción canto, y Gene Kelly, en una sosa y breve lección de baile.
Más allá de ello, la película es floja, con poca química entre Marilyn y Montand; escasa gracia en su esencia de comedia de falsa identidad y pareja dispar; un Tony Randall, a diferencia de las comedias con Doris Day y Rock Hudson, totalmente desaprovechado.
Marilyn, que interpreta el “My Heart Belongs To Daddy” de Cole Porter, luce espléndida vestida por Dorothy Jenkins a la par que se muestra dramática en torno a ponderar el valor real del talento y del dinero, en suma, de la felicidad.
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