Dirección: Nicholas Ray.
Intérpretes: Humphrey Bogart, Gloria Grahame, Frank Lovejoy, Art Smith.
Con guión de Andrew Solt (“Vorágine”).
Sinopsis
Dixon Steele (Humphrey Bogart) es un guionista de carácter violento al que encargan la adaptación al cine de un libro que ha leído Mildred Atkinson (Martha Stewart), la chica del guardarropa del restaurante al que acude habitualmente y a la que invita a su casa para que le resuma la novela.
A la mañana siguiente, Martha aparece muerta y Dixon se convierte en el principal sospechoso del hecho criminal.
Su nueva vecina en Los Angeles, Laurel Grey (Gloria Grahame), aclara su inocencia afirmando que vio marchar a Mildred de su casa.
Poco después, Dixon y Laurel inician una relación sentimental en progresiva tensión. Laurel comienza a dudar de la inocencia de Dixon.
Crítica
Gloria Grahame y Nicholas Ray eran matrimonio en la época del rodaje de este valioso film, un misterio criminal cuya intriga se supedita al retrato psicológico de su personaje masculino, un guionista violento, proclive a la riña, a la pelea… cuyas actitudes desequilibradas le conducen al título del film como maltratador (y también víctima) de su naturaleza incontrolada.
Humphrey Bogart, que produce la cinta con su empresa Santana, está espléndido en su interpretación como neurótico falso culpable, al igual que una glamourosa Gloria Grahame en creciente duda, con un buen aporte secundario de Art Smith, agente de Bogart y sufridor de su temperamento.
La película, basada en una novela de Dorothy B. Hughes, se maneja con tensión, con intensidad, posee diálogos de mérito y no cae en una resolución facilona.
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