Hola felicidades por su extraordinaria pagina. Me gustaría que me dijesen su opinión sobre…, en la que, entre otras lindezas, se despacha con fuertes críticas sobre los Beatles y Elvis.

Guillermo.

Pues no conocíamos eso (que no vamos a darle publicidad) . La verdad es que el trabajo es prolijo pero en tanto contenido no se puede encontrar tanta memez, tanta gilipollez por frase, tanta fatuidad, tanto infantilismo (encima parece trascendentalizar su “sesudez” pueril, vamos, vamos…), tanta concesión al esnobismo que termina confundiendo al personal poco ducho y manipulable. Todo lo que dice de los Beatles es de una ignorancia sin límites.

Mire, cada uno puede tener su opinión pero lo que dice este tipo no se sostiene por ningún lado, moviéndose básicamente por esnobismos gratuitos de “yo soy muy coooool y me desvío de la masa ignorante” y afán de notoriedad estableciendo comentarios sinsentido.

No sabe de lo que habla aunque aparentemente parezca que sí (incluso en otro apartado dice algo de un instrumental cuando no es instrumental ni es nada).

Al margen de que los comentarios de referencias sonoras son un gigantesco despropósito y muestran flaquezas enormes tanto en conceptos como en cronología del rock.

Simplemente un dato clarificador. Si mal no recordamos dice que los Beatles aparecían sonriendo tal y cual… Primero como si fuese malo sonreír, y segundo este buen señor no tiene ni idea. Simplemente el que posea (claro, lo tendrá en mp3, eso si lo tiene) el “With The Beatles”, disco del año 1963 en el cual por primera vez en la historia del rock (y más con esa trascendencia popular, y si obviamos dentro del country y sin primer plano el “The sound of Johnny Cash” del 62) un grupo aparecía de forma seria y vestidos totalmente de negro (que por otro lado eso tampoco es un valor en sí). Citar en contraste, si mal no recordamos, el primero de los Stones en tal apostura, que es del ¡¡¡64!!! (es decir, un año después) ya marca la fiabilidad sobre las opiniones de tal fulano.

Lo de Elvis ya no lo hemos leído por si se multiplican los sarpullidos aunque sinceramente, y tras la primera (y única) lectura de la sublime estulticia, no deja de resultarnos indiferente tal opinión.

Además no hay que trascendentalizar tanto la música pop ni enfrentar a sonidos por la misma, sino disfrutarlos.