Un político siempre está dispuesto a manipular el debate público.
Nunca discuto una novela cuando la estoy escribiendo por el miedo a que hablar sobre ella disminuya mi deseo de escribirla.
Las armas son mucho menos importantes que el conocimiento.
Cada lectora y lector tiene que poner su mente y su corazón en el texto que lee.
Aunque la gente contemple violencia en la pantalla de cine, no tiene porque salir de la sala y robar en una tienda de licores o asesinar a alguien. Realmente no creo que exista correlación.
Los libros son un maravilloso escapismo. Puedo abrir un libro y desaparecer en sus páginas. Esa era la única manera de salir de mi casa cuando era un niño.