• Por Marta Canacci

carmen-mola-la-red-purpura-criticaSinopsis

La inspectora Elena Blanco investiga a la Red Púrpura, una organización que trafica con vídeos violentos en Internet, en la que se muestran torturas y muertes.
Su propio hijo, Lucas, desaparecido cuando todavía era un niño, puede estar vinculado a esta red de prácticas sádicas.
Liderando la BAC (Brigada de Análisis De Casos), Blanco intentará desarticular la organización.

Crítica



Carmen Mola (seudónimo de autoría desconocida) triunfó con su novela negra debut, “La Novia Gitana”, un libro protagonizado por la inspectora Elena Blanco que continúa con este título, “La Red Púrpura”, una intriga criminal que nos adentra en el lado más oscuro, perverso, de Internet, con un voyeurismo criminal, insano, que disfruta de torturas y asesinatos.

El libro, narrado en tercera persona, se divide en cinco partes con capítulos cortos, lo que, unido a su lenguaje sencillo, directo, y la narración dinámica, muy de guión de telefilm, facilita la lectura rápida.

La historia, cronológicamente ligada a su anterior novela, es básica, con asuntos nada originales de sadismo y una búsqueda personal, emocional, de madre-hijo con participación en el caso de distintas unidades familiares.




La trama tiene como centro casi único a la inspectora Blanco, personaje que opaca a todos los demás, resultando intercambiables, poco simpáticos y sin personalidad más allá de clichés policiales y rasgos de forzada singularidad.

Escarba la “autora” con realismo en temas escabrosos, turbios, en una novela de mucha acción pero poca reflexión.

Mientras bebe grappa y canta a Adriano Celentano en karaokes, Elena Blanco intenta liberar traumas con su hijo secuestrado y educado por delincuentes.

Como intriga criminal-purga emocional tiene nervio, con una acción entretenida a pesar de sus lugares comunes y de que su entramado se resuelve de forma muy previsible.