• Por Javier Platas

curtains tinderstick reviewCrítica

Hermoso disco de los Tindersticks que supuso su consagración como una de las bandas más exquisitas del panorama británico de los 90.

Dominan los tonos melancólicos y pesarosos intensificados por la grave vocalidad de Stuart Staples plena de emoción y sensibilidad que en más de una ocasión pone el vello de punta.

Hay palpables huellas de gente como Scott Walker, Lee Hazlewood, Leonard Cohen e incluso Tom Waits.

Letras maduras, reflexivas e íntimas además de unos bellos arreglos de cuerda y viento que tanto pueden ser épicos como sutiles son otros aspectos favorables de este álbum.

Lo peor es la reiteración tonal y el exceso de temas (se hace demasiado largo), hechos que acaban perjudicando al conjunto de un trabajo por otra parte muy estimable. Como curiosidad citar la colaboración de Isabella Rossellini prestando su voz en la canción que cierra el disco, “A Marriage Made In Heaven”.