Dirección: Andrew V. McLaglen.
Intérpretes: James Stewart, Dean Martin, Raquel Welch, George Kennedy.
Película basada en un relato de Stanley Hough. Con guión de James Lee Barrett (“Los Caraduras”, “Boinas Verdes”).
Sinopsis
Texas, año 1867.
Dee Bishop (Dean Martin) ha sido detenido junto a su banda de ladrones de bancos. Su hermano Mace (James Stewart) hará todo lo posible para que no sean ahorcados.
Crítica
No tiene mal reparto este western menor al que no le falta ni humor ni tragedia.
Una pena que la historia, revoltijo de lugares comunes con influencias de los spaghetti western de Sergio Leone y compañía en torno a un secuestro y una persecución, con el añadido de cuitas entre hermanos, reflexiones de manual y el personaje femenino de adorno, no sea nada del otro mundo y no aporte nada singular al espectador ducho en relatos clásicos del Oeste.
Andrew V. McLaglen, con el libro de estilo de su maestro John Ford, otorga suficiente ritmo a la acción, siendo lo más sobresaliente de esta producción de Robert L. Jacks con música de Jerry Goldsmith, la plausible labor fotográfica en exteriores y en Panavision de Wiliam Clothier, colaborador también del citado Ford en imprescindibles películas, entre ellas “El Hombre Que Mató a Liberty Valance”.
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