Dirección: Paul Briggs, Don Hall, Carlos López Estrada y John Ripa.
Interpretes: Película de animación.
Con guión de Qui Nguyen y Adele Lim (“Crazy Rich Asians”).
Sinopsis
Los Druun, espíritus malignos que petrifican a la gente, derrotaron a los dragones provocando el caos en Kumandra, dividida desde ese momento en territorios enfrentados.
Raya, hija de Benja, vive en Corazón, un territorio en donde se encuentra una gema que deriva de la magia de Sisu, el último dragón. El objetivo de Benja es unir de nuevo a los territorios y vivir en armonía. Sin embargo, su objetivo no se cumple y termina petrificado con la gema rota en pedazos.
Años después, Raya busca a Sisu con la esperanza de reconstruir la gema.
Crítica
Película de fantasía épica animada. La historia es poco original y resulta muy predecible.
La protagonista es una joven heroína, valiente y decidida, muy tópica en los últimos tiempos. Se introduce en una relación paterno-filial muy especial antes de iniciar una aventura de búsqueda y supervivencia.
Raya, esa protagonista, intenta reunir las piezas de la gema de dragón (un mcguffin) para devolver la armonía y la paz a Kumandra.
El film sigue las pautas formulistas de cintas similares Disney. Solo le falta el aspecto romántico.
La trama tiene drama, comedia, fantasía, aventura… y mucha moralina.
Recupera la figura del dragón como personaje mítico, la protagonista es heroína ultradecidida, bondadosa, carismática… con rasgos orientales, forzada a una épica.
Namaari, la antagonista, igualmente con rasgos orientales, tiene motivaciones comprensibles, humanas.
Del conflicto entre ambas se derivan los temas principales: la confianza como elemento de unión frente al egoísmo y el enfrentamiento.
En cuanto a los secundarios, la mayoría son refuerzos cómicos: su original mascota (el armadillo gigante), la dragona Sisu, un tanto cursi y demasiado intensa por momentos, la bebé ladrona…
La técnica de animación crea paisajes variados, agradables, desde los áridos paisajes estilo western a poblaciones exóticas.
Las expresiones son realistas, en especial Raya (llena de pequeños gestos), y peleas rodadas como si se tratara de una película de artes marciales o un videojuego hiperrealista… pero nada que sorprenda.