Dirección: Andrea Bianchi.
Intérpretes: Nino Castelnuovo, Edwige Fenech, Femi Benussi, Solvi Stubing.
Con guión de Andrea Bianchi (“La Mujer De Mi Padre”) y Massimo Felisatti (“La Noche Que Evelyn Salió De La Tumba”).
Sinopsis
Una modelo ha muerto tras serle practicado un aborto.
Poco después el médico que le realizó la operación (Gianni Airò) es asesinado. Más tarde el criminal mata a un fotógrafo (Claudio Pellegrini) del estudio para el que trabajaba la modelo, propiedad de Gisella Mayer (Amanda) y su marido Maurizio (Franco Diogene).
Crítica
Giallo de Andrea Bianchi que tiene claves básicas del subgénero criminal: intriga whodunit narrada con estilo, dosis de erotismo (aquí casi su base con tramos softcore) y un criminal con guante de cuero (en este caso un mono entero de cuero con casco de motorista). Bien.
La tensión se mantiene, la historia entretiene, hay muchos y peculiares personajes. La sucesión de crímenes, rutinaria, no aburre. El guión contiene giros con sorpresa.
Una pena que el tramo final haga caer en picado el relato por su resolución inverosímil.
Los motivos no cuadran en parte de los asesinados, y la truculencia rocambolesca es de risa, buscándose el morbo por el morbo. Lástima.
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